Hoy en día, existen en el mercado una gran variedad de vinilos a nuestra disposición, tanto para la decoración de interiores como para la rotulación de vehículos, publicidad en escaparates, instalaciones comerciales y un largo etcétera.
A continuación te mostramos los distintos tipos de vinilo según diversos criterios, con el objetivo de que puedas elegir el vinilo que mejor se adapta a tu proyecto:
Según su formulación:
- Monomérico: La composición de este tipo de vinilo, más sencilla que los demás, tiene el incoveniente de que encoge con el paso del tiempo, dejando un cerquillo a su alrededor a medida que va reduciendo su tamaño.
- Polimérico: Incorpora polímeros que lo dotan de mayor resistencia. A diferencia del monomérico, este tipo de vinilo no ve afectado su tamaño con el paso del tiempo, por lo que, combinado con una laminación, se convierte en una opción perfecta para campañas de larga duración.
- De fundición: Es moldeable, adaptándose a cualquier tipo de superficie. Su precio es mayor que los anteriores, pero su durabilidad compensa este incremento. Se emplea principalmente en la rotulación de vehículos o en trabajos que contengan superficies curvas .
Según su diseño:
- De corte: está formado por una lámina de un único color, sobre la que se realizarán los cortes necesarios para dar forma al diseño elegido. Pueden combinarse varios vinilos de corte para conseguir diseños en diferentes colores. Empleado principalmente para letras y formas sencillas, con pocos colores.
- De impresión: consiste en una lámina blanca o transparente sobre la que se aplica la impresión deseada, lo que nos proporciona mayor libertad para realizar el diseño que más nos guste. Aunque se imprime en láminas rectangulares, a través del troquelado podemos dotarlo de la forma que más nos interese.
Según su forma de colocación:
- Adhesivo permanente: Idóneo para trabajos que permanezcan expuestos por largos períodos de tiempo. Es aconsejable que sea colocado por profesionales o personal con experiencia para que el acabado sea el deseado.
- Adhesivo removible: Similar al anterior, pero de colocación más sencilla sin dejar restos cuando se retira. Normalmente se utiliza en stands publicitario en congresos, ferias, campañas estacionales, etc.
- Agua y jabón: para la fijación del vinilo emplearemos una mezcla de agua y jabón, aplicada tanto en el vinilo como en la superficie donde lo vamos a instalar. Aunque la colocación del vinilo no es demasiado complicada a través de esta técnica, debemos de tener cuidado con evitar o eliminar las antiestéticas burbujas de aire que se puedan formar cuando se está colocando.
Según su comportamiento frente a la luz:
- Transparente: nos permite ver al otro lado del vinilo, con un efecto similar al de una vidriera o un papel celofán.
- Translúcido: deja pasar la luz, pero impiden una visión nítida de lo que se encuentra al otro lado del vinilo. Es de gran durabilidad y su coste es relativamente bajo. Dentro de esta categoría también encontramos el llamado vinilo ácido translúcido.
- Microperforado: posee la peculiaridad de que desde el exterior de nuestra estancia veremos únicamente el diseño impreso, sin ver el interior de la misma, mientras que desde el interior podremos ver lo que sucede en el exterior. Ha de colocarse en la parte exterior del cristal. Ideal para nuestras campañas en escaparate.